En el año 2003, le fue concedida LA MEDALLA DE EXTREMADURA a la ESCUELA DE ARTE de Mérida. La recogió, en nombre de nuestra institución, nuestro querido y recordado director D. Juan Leyva, profesor del cuerpo de Artes Plásticas y Diseño. La medalla le fue concedida por las siguientes razones, según el decreto: “ Su dilatada labor formativa y el empeño de cuantos fueron sus precursores y patrocinadores hasta su incorporación a las enseñanzas regladas, le hacen acreedora al más alto galardón regional”
El mismo decreto reconoce, en los motivos, la incorporación de la Escuela de Arte a las enseñanzas regladas. Estamos en las enseñanzas regladas, siendo nosotros. Tan regladas como las de cualquier instituto de bachillerato, y por nuestra trayectoria se nos concede el mayor galardón de la región. Distinción que también ostentan otras personas e instituciones de reconocido prestigio como el Rey, la Reina y el Principe Felipe, artistas como Barjola, Eduardo Naranjo, Wolf Vostell, Monserrat Caballé, Pablo Guerrero y Rafael Ortega, ceramista y profesor de la Escuela, escritores como Dulce Chacón, Joaquín Cercas, Luis Landero….
La administración extremeña reconoció la singularidad de nuestra institución (La Escuela de Arte de Mérida es la única de la región y está funcionando desde 1932 cuando España era una república y todavía no había estallado la sublevación de Franco) Muchos de los habitantes de Mérida y del resto de Extremadura han pasado por ella y en ella han estudiado Dibujo, Pintura, Modelado, Contabilidad, Bordados, Ebanistería, Mosaicos, Cerámica, Talla…La Escuela, nuestra escuela es el único centro escolar de Extremadura que ha sido galardonado con la Medalla. Por eso no entendemos ahora que la misma administración que nos premió, esté ahora precipitando la desaparición como tal de nuestra antigua, prestigiosa, noble y galardonada institución.
Poco a poco y aviesamente, está quitándose este inofensivo aunque extraño grano de su culo funcionarial. La inspección no sabe de lo nuestro, ni quiere aprender. No quieren centros raros, los quieren uniformados, todos por ese lado, todos institutos. Nada de cuerpos distintos, todos clones, nada de profesores de “Artes Plásticos y Diseño” ¿Pero qué está pasando? ¿Cuántos profesores numerarios de A. P. y Diseño quedan en la Escuela? 5 ó 6. Cuando se jubilen estos, ya no quedará ninguno, todos serán profesores de Instituto. ¿Es eso lo que quieren nuestros gobernantes? ¿Cómo se digiere esta incongruente bazofia? ¿Cómo se puede dar la Medalla a una institución y después acabar con ella? Pa ese viaje nos la podían haber dado a título póstumo, después de haber consumado el proceso de aniquilamiento, así el asesinato se hubiera notado menos.
Es necesario que estos tres profesores, Encarna, Sebastián y Antonio se queden en sus puestos de trabajo y es necesario que se convoquen oposiciones al cuerpo de Profesores de Artes Plásticas y Diseño en todos los centros de Arte de la región o sea en el de Mérida.
La Escuela se siente orgullosa de haber recibido la Medalla de Extremadura, hasta el momento, pero no sé si la administración actual está igualmente orgullosa de que la Escuela tenga LA MEDALLA DE EXTREMADURA. ¡No lo parece!
oLÉ aHÍ
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